Es tranquilizante saber que existen ciudades que disponen de centros de salud solo para uso de los presos. A cualquiera le resulta angustiante que al visitar un centro hospitalario se deba convivir con maleantes, en nuestro propio estado de desvalido, adicionando la seguridad de los seres queridos que no acompañen en medio de nuestra convalecencia.
La custodia hospitalaria, aunque se mantenga eficiente en sus labores de alejamiento y resguardo de los delincuentes, no deja de preocupar al ciudadano común, por sus necesidades médicas y de seguridad se ven entrevés en una misma escena.
Dentro de un recinto hospitalario, la cerrajería sirve para los galenos y personal general de la institución, pero para los pacientes está dispuesto el personal de vigilancia y los organismos policiales afiliados a los hospitales.
Obviamente nadie desea ponerse a un derecho humano de salud de otro ser humano, pero cuando se ve entre dicho la propia salud y seguridad, es necesario anteponer nuestros intereses. Es grandemente aplaudible la creación de centros de salud penitenciarios en donde se extremen las medidas de seguridad y el trabajo de los cerrajeros profesionales sea fundamental.
Condición grave del paciente
La condición de gravedad de un paciente penitenciario en conciencia es mucho más alarmante que aquel que se encuentra inconsciente, porque el valor de su vida es mucho menos, pudiendo realizar acciones delictivas improvisadas
Nunca esta demás dudar de las condiciones físicas de los presos, previniendo nuestra propia estabilidad, son muchos los casos de delincuentes custodiados que se salen de control en estos ambientes presentando riesgos para los pacientes y el personal.
Traslados de presos a centros hospitalarios
Los vehículos de traslados se ha sabido que siempre están dotados de lata seguridad en los cierres, sin embargo, las posibles incidencias de un escape en el traslado estar bajo la responsabilidad y negligencia de los custodios.
Un auto para traslado de delincuentes en custodias, no pueden ser atendidos por cerrajeros comunes, sino que sus problemas con la seguridad, deben ser solucionados con profesionales en la cerrajería y las nuevas soluciones estén a la mano de los funcionarios policiales.
Tanto la llegada como la permanencia es riesgosa, más aún la salida, cuando el paciente custodiado privado de la libertad se encuentra restablecido en materia de salud, recuperando sus habilidades motoras lo que puede facilitar un ataque.
Características de las habitaciones
Los hospitales propuestos para atender solo pacientes privados de libertad, alardean de tener escasos muebles que están atornillados al suelo, los armarios no poseen puertas, hay barrotes en las ventanas y los espejos están hechos de un material que, si se rompe, no corta.
El acceso se logra al atravesar dos puertas de material reforzado que se abren desde un control de un policía hace guardia. Se encuentran ubicados pequeñas cámaras que ayudan a los agentes a monitorizar cada recoveco. Todos los objetos y muebles son hechos de materiales que no pueden ser empleados como objetos cortantes o contundentes.
Que irónico son las características de estos establecimientos, muy cercano a los que se sugiere como vivienda para sobrellevar la delincuencia en las ciudades peligrosas, viviendas cárceles ciudadanas.